¿Qué es el efecto túnel en conducción?
¿Qué es el efecto túnel?
El efecto túnel es la reducción del campo de visión periférica del conductor, es decir, que se produce una reducción significativa del ángulo de visión. En concreto, solamente vamos a ver lo que hay enfrente de nosotros, como si estuviéramos en un túnel.
El problema del efecto túnel es que causa muchos problemas a la hora de conducir, incluyendo menos capacidad de reacción y de anticipación. Además, te distraes más fácilmente al tener que girar la cabeza, tendrás más estrés y mayor agresividad. Todo eso aumenta las posibilidades de tener un accidente.
¿Qué causa el efecto túnel?
Este efecto está causado por cuatro elementos, siendo la velocidad elevada, el consumo de alcohol y drogas, el cansancio y el estrés. Vamos a verlos uno por uno, explicando cómo y por qué afectan.
Velocidad de la conducción
La velocidad es la mayor causa del efecto túnel. A mayor velocidad, menor ángulo de visión, ya que nos estamos moviendo y los ojos no pueden percibir de forma nítida lo que ocurre. Cuando el coche está parado, se tiene un ángulo de visión de 180 grados, el cual va disminuyendo con la velocidad de esta manera:
- 65 km/h: 70º
- 100 km/h: 42º
- 130 km/h: 30º
- 150 km/h: 18º
Como se puede ver, a más velocidad, menor ángulo de visión y mayor efecto túnel. Por ello, el exceso de velocidad es una de las principales causas de accidentes, ya que disminuye la capacidad de reacción del conductor y aumenta los accidentes.
Waylet es la app gratuita de pago y fidelización móvil que te ofrece los mejores descuentos y promociones. ¡Descarga ya la app y comienza a ahorrar!
Ingesta de bebidas alcohólicas y otras drogas
La velocidad no es la única causa del efecto túnel. Otra causa es la ingesta de alcohol y drogas, las cuales reducen la agudeza visual y los reflejos. Por ejemplo, consumir alcohol provoca una reducción de la velocidad de los movimientos oculares. Eso reduce la información que se percibe del entorno, causando el efecto túnel. Además, aumenta la fatiga ocular, la somnolencia y disminuye los reflejos.
Por si fuera poco, el consumo de estas sustancias hace que se tenga menor respeto por la velocidad. El menor respeto por la velocidad hace que se tienda a ir más deprisa, provocando aún más problemas por lo visto anteriormente.
Cansancio acumulado
Si estás muy cansado, también aumenta la posibilidad de sufrir efecto túnel, aunque estés conduciendo sobrio y despacio. La fatiga disminuye la agudeza visual al afectar a la capacidad de concentración, conduciendo mucho peor. Por este motivo, nunca se debería conducir con sueño.
Sentir estrés o ansiedad
Finalmente, la visión en túnel se relaciona con sufrir estrés y ansiedad, es decir, cuando te sientes superado por los acontecimientos. Los síntomas como la sudoración, la dificultad para respirar y las taquicardias también afectan a la visión, reduciendo el campo de visión periférico.
Hay muchas causas del estrés, muchas de ellas externas, como por ejemplo el trabajo, la familia o la vida personal en general. Por otro lado, la propia conducción causa estrés, especialmente en personas que cogen poco el coche o que han sufrido un accidente, conducir con atascos o mal estado de la carretera, conducir cuando hace mucho calor y otras situaciones como tener prisa o haberse perdido.
Cómo evitar la visión túnel al conducir
Por suerte, se puede reducir el efecto túnel con algunos consejos que te ayudarán a evitar estos 4 factores dichos anteriormente:
- Respeta los límites de velocidad: estos límites están hechos para algo, así que respétalo. Si te sientes ese día muy estresado, hace mal tiempo o estás en una carretera que no conoces, conduce a una velocidad ligeramente inferior a la estipulada.
- Si bebes, no conduzcas: como hemos visto, el alcohol y las drogas tienen un efecto nocivo para la conducción, provocando el efecto túnel y otros problemas graves para llevar un vehículo. Aquí deberías conducir con una tasa de 0, ya que las tasas bajas afectan ya a la conducción, a pesar de ser legal conducir con ellas.
- No conduzcas con sueño: siempre evita conducir con sueño. Además de provocar visión en túnel, podrías dormirte al volante. Si eso te pasa, busca un área de descanso y duerme.
- Si eres novato o no coges mucho el coche, evita rutas complejas: como hemos visto, un conductor novel o alguien poco habituado al coche es más propenso a ponerse nervioso. Hasta que sepas conducir bien, evita las situaciones estresantes.
- No tengas prisa: las prisas son malas consejeras, ya que provocan estrés y una mayor velocidad. Para evitar salir con prisas, lo mejor es planificar con antelación, buscar las rutas donde no haya atascos y salir siempre con tiempo para llegar a los sitios sin tener que correr. Además, evita conducir con mucho calor o en malas condiciones.
Actitud relajada: a nadie le gusta tener un atasco, pero no es motivo para ponerse tan nervioso. En su lugar, busca una ruta alternativa o toma una actitud relajada, aprovechando el atasco para tomarse un respiro o para escuchar música. Otra cosa importante es evitar discutir en el coche, dejando los problemas personales para después.