Filtro de partículas, ¿qué es y cómo se limpia?
Cuestión de gases:
El filtro de partículas fue implementado en el año 2006, con el fin de reducir la contaminación y emisiones de los vehículos. Inicialmente, fue creado para el vehículo diésel, pero después se terminó implementando en los de gasolina.
Su objetivo es eliminar impurezas en forma de ceniza, las cuales se generan en el motor. El filtro evita que acaben en la atmósfera y consigue una reducción en las emisiones, permitiendo cumplir con exigentes normativas como la EURO 5.
¿Qué pasa si está sucio?
El filtro de partículas acumula suciedad y hollín en el mismo a lo largo del tiempo. Los propios vehículos tienen un sistema de regeneración del filtro, que se hace cada 500 kilómetros aproximadamente o cuando el filtro está a un 40%. Es la centralita la que detecta el estado del filtro por el sensor de presión. Si está en buen estado, la presión de entrada debería ser mayor a la de salida.
La regeneración, que se hace mientras se circula, consiste en un aumento de la temperatura de entre 550 y 800 grados, para descomponer las partículas sólidas del filtro y poder dejarlo limpio. No es más que la incineración del hollín acumulado.
Eso sí, la acumulación de kilómetros hace que haya demasiada acumulación de partículas, más de las que el propio vehículo puede eliminar por sí mismo. En estos casos, la regeneración automática ya no funciona y habría que recurrir a la regeneración manual.
La temida luz amarilla:
El colmatado consiste en la obstrucción o atasco de un sistema filtrante. Los vehículos más modernos te avisan del riesgo con un mensaje en el panel, que puede indicar “Riesgo Colmatado Filtro Partículas” o “Check engine”, así como una luz amarilla que indica que hay problemas. Eso sí, hay otros indicadores que muestran cómo se va taponando el filtro y que nos permitirán actuar antes de su colmatación.
En primer lugar, se nota una pérdida de potencia y un mal funcionamiento. Otras veces, al apagar el coche, el ventilador sigue girando, a pesar de tener el motor apagado. Eso es porque está sobrecalentado y necesita enfriarse.
Si la regeneración no funciona bien, el sistema Start&Stop del coche se desactivará por centralita para que no se interrumpa el proceso y para aumentar la temperatura. De hecho, si ha comenzado el proceso de regeneración en cualquier caso (funcione bien o no), es recomendable seguir circulando con él hasta que termine (dura unos minutos).
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¿Se puede evitar el taller?
Con un poco de suerte, no hay que cambiarlo por otro. En su lugar, puede limpiarse y recuperar su funcionamiento original por poco dinero. Hay varias formas de limpiar un filtro de este tipo. Vamos a ver las 5 más conocidas:
- Regeneración manual: para hacer una regeneración, hazlo circulando en la carretera a unas revoluciones relativamente altas, entre 2000 y 2500 rpm. Es la forma menos efectiva, pero ¡es (casi) gratis! Hazlo si sueles circular por ciudad y nunca por autopista.
- Uso de productos de limpieza de filtro de combustible: son productos que se echan en la gasolina o diésel. Su objetivo es subir la temperatura del tubo de escape y ayudar a disolver mejor la suciedad del filtro. Es una solución económica que no te costará más de 30 euros.
- Limpieza por ultrasonidos: el sistema de ultrasonidos, que solamente está disponible en un taller, utiliza estos sonidos para vibrar el filtro y deshacer las impurezas. El proceso es más costoso, siendo de unos 100 euros y durando una hora.
- Uso de máquina de diagnosis: la máquina de diagnosis sirve para controlar el motor y forzar la regeneración del filtro de partículas. Por ejemplo, es capaz de elevar la temperatura del motor hasta que sea óptima y controlar las revoluciones para eliminar el hollín. El coste es de unos 50 euros y es el método más efectivo hasta la fecha.
- Detergente: se trata del último recurso. Si el filtro está saturado en más de un 95%, toca desmontar el filtro y lavarlo en detergente durante una hora. Después, con agua a presión, saldrá el hollín y podrá volverse a montar (después de secarlo bien). En otros casos, se utilizan otros líquidos de limpieza más parecidos al descarbonizante. Es el proceso más costoso, llegando hasta los 150 euros. Si esta solución no funciona, solo queda sustituirlo por otro.
¿Y ahorrarte unos euros?
¿Hay alguna forma de mantener en buen estado el filtro de partículas durante más tiempo? Cambiando algunos hábitos, se pueden evitar obstrucciones.
- No interrumpas regeneraciones: como hemos dicho antes, si el coche está regenerando el filtro de partículas, más vale seguir circulando y dejar que termine.
- Seguir el mantenimiento recomendado: cambiar el aceite a tiempo y usar el tipo correcto es fundamental para evitar la obstrucción. Los aceites de calidad permiten soportar mejor las altas temperaturas que se generan al regenerar.
Mejor trayectos largos y por carretera: la circulación en trayectos cortos por ciudad es lo más dañino para el filtro de partículas. En carretera es más probable que haya regeneraciones al trabajar a temperaturas más elevadas, acumulando menos hollín. Si sueles circular por ciudad, saca el coche a circular por carretera cada 800 km.