Cómo funciona el impuesto del gas en la factura de la luz
¿Por qué se cobra el gas en la factura de la luz?
Para muchos usuarios, ha sido sorprendente ver un nuevo concepto de tope al gas en la factura de la luz. Este cargo puede llegar a ser elevado en ciertos casos, ya que se ha cobrado incluso a personas que no tienen gas natural, incluyéndose en la factura de la luz.
¿Por qué se incluye aquí? Porque se implantó un tope al precio del gas usado para generar electricidad. Debido a la pérdida de ingresos para las plantas, hay que compensarlos por la diferencia entre el coste real y el efectivo, el cual se paga entre todos según Real Decreto Ley. En definitiva, es un reparto entre todos por la energía que se consume.
Funcionamiento impuesto de gas en la luz
El gas se puede utilizar para generar electricidad, pero su precio estaba disparado por la crisis energética. Es por ello que se decidió emitir el Real Decreto-ley 10/2022, como medida temporal para contener el precio de la luz. Consiste en topar el precio del gas que se usa para generar electricidad, aplicándose a partir de junio de 2022.
Esta medida se conoce como excepción ibérica, ya que se aplicó solamente en España y Portugal con permiso especial de la UE. Su finalidad es abaratar el precio, topando inicialmente el gas a 40€/MWh para controlar la subida. El llamado tope no es más que la compensación que reciben las empresas de gas por no vender el gas al precio real.
El límite del tope se ha ido elevando poco a poco desde diciembre, hasta que llegue a desaparecer. Comenzó en 40 euros por kWh, subiendo 5 kWh por mes hasta que llegue a 70 kWh en mayo. De momento, estará vigente hasta el 31 de mayo de 2023, aunque podría prorrogarse si vuelve a ocurrir una crisis energética. .
El precio del tope al gas dependerá de la diferencia entre el precio topado y el real. Este precio depende de la oferta y demanda de gas como generador de electricidad. A mayor diferencia entre precio real y topado, mayor será lo que se pague de tope al gas.
Los precios más altos los tuvimos en agosto de 2022, con 0,1355 en hora punta y 0,1615 de media. En cambio, en febrero de 2023 alcanzó un precio negativo de -0,000555 en hora punta y -0,00169 de media. Se calcula multiplicando el consumo energético por ese coste en €/kWh. Cabe destacar que los precios suelen ser superiores en horario valle al horario punto, ya que no hay opciones de utilizar energía fotovoltaica por la falta de luz.
La razón de esta bajada del precio del impuesto del gas en la luz es el aumento de la generación renovable de electricidad en detrimento al gas, así como la subida del tope para los últimos meses. Si es negativo, significa que el precio del gas es inferior al tope y no hay nada que compensar. El aumento de horas de luz seguramente haga bajar el precio del tope aún más en los meses venideros.
Algunos expertos aseguran que la medida ha terminado siendo positiva. A pesar de tener que pagar este impuesto y tener la factura más cara de la historia en agosto, sin ella el precio del MWh del gas hubiera sido muy superior. Al repartirse de esta forma más equitativa, se ha terminado pagando menos y se ha contenido la subida con éxito.
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¿Quién tiene que pagar el impuesto del gas en la luz?
Lo tienen que pagar todos los consumidores que están en el mercado libre de la luz y que tengan un contrato actualizado a partir del 26 de abril de 2022. De hecho, a algunos usuarios les vino el aumento de golpe al renovar, llevándose una sorpresa desagradable. Todo el que tenga dado de alta la luz tendrá que abonarlo, independientemente de si tiene contratado gas por otra parte o no.
Están exentos los consumidores del mercado libre en Baleares, Canarias, Ceuta y Melilla. Los que tienen la tarifa PVPC también lo pagan, pero está integrado en el coste de energía, así que es invisible y es imposible saber cuánto pagas de ese concepto en concreto.
¿Cómo se refleja en la factura?
La factura refleja este impuesto en el desglose de “Coste tope del gas RDL10/2022”. Se puede ver como un concepto separado a otros como la potencia contratada y la energía consumida, sumándose al final a la cuantía a pagar de la factura. Otras veces, hay que pagar una compensación de unos 30 euros por finalización de contrato y alta nueva, aunque depende de la compañía. Estos costes están dentro del nuevo concepto llamado “cargo normativo”.
Como dijimos antes, en la tarifa PVPC no aparece ningún concepto de impuesto del gas en la factura de la luz. En este caso, todo está en el mismo concepto llamado “Coste de la energía”.
