Asfalto
Lo usas a diario, pero seguramente no sepas realmente lo que es el asfalto. Hoy veremos lo que es, cómo se produce y sus usos comunes.
¿Qué es el asfalto?
El asfalto es una mezcla de brea (fracción más pesada del petróleo crudo) con gravilla o arena. Su nombre viene por el depósito natural del lago asfaltites, el cual tiene una gran cantidad del mismo. Además, está presente en el mar Muerto, por lo que se conoce como betún de Judea.
¿Cómo se produce el asfalto?
Aunque pueda encontrarse en depósitos naturales como el ya mencionado lago asfaltites, el asfalto que se utiliza a día de hoy es en su mayoría destilado. La razón es que es más económico obtenerlo de esa forma, ya que es un subproducto de las refinerías. El natural es de una muy alta calidad y se usa desde la antigüedad, pero es demasiado costoso.
Al obtener el crudo de petróleo, se separa en partes según su composición química, creando los diversos derivados del mismo. De la parte más densa y pesada se obtienen los asfaltos, los cuales se mezclan con gravilla o piedra, creando una masa conocida como hormigón asfáltico. En algunas ocasiones, se trata con polímeros para que resista mejor el paso del tiempo.
Cuando se obtiene a elevadas temperaturas, de entre 204 y 316ºC, se obtienen asfaltos soplados. Por otro lado, a 500ºC se obtiene otro tipo de asfalto para fabricar aislantes.
Asimismo, es posible el reciclado de los asfaltos. Se puede aplicar en caliente o templado, reutilizando los materiales y aplicando emulsiones bituminosas si se hace en templado. También existe una técnica en frío, donde se fresa una parte y se mezcla con cemento, añadiendo emulsiones bituminosas y otros aditivos.
Usos del asfalto
El uso más común del asfalto es la pavimentación como hormigón asfáltico. Es un material impermeable, que cohesiona bien, adherente y resistente a esfuerzos instantáneos y permanentes.
Por otro lado, el asfalto soplado se utiliza para hacer tejados, cogiendo el asfalto de mayor temperatura para aislante. Finalmente, hay que destacar su uso como betún de Judea, usado para dar color a los zapatos, envejecer artificialmente los muebles o dar color a piezas de base porosa.