¿Qué combustible usan los coches de F1?
Composición del combustible de F1
El combustible que usan para los coches de F1 tienen la misma base que los combustibles que podemos encontrar en cualquier estación de servicio, ya sea gasolina o gasoil. La única diferencia es que usan una serie de aditivos que hacen que los motores no se dañen y funcionen a máxima potencia.
El combustible está compuesto con una mezcla de hidrocarburos parafínicos que tienen un aspecto similar a la cera.
Los coches tienen que funcionar a máximo rendimiento, por eso, el combustible que fabrica cada combustible para sus coches está compuesto con unos aditivos que consiguen que todas las partes del coche se mantengan en perfecto estado y limpias.
Una peculiaridad que tiene dicho combustible es que es mucho más ligero que los combustibles normales, ya que eso les añadiría peso y harían que corrieran mucho más lento de lo que debería. Los carburantes que se usan en F1 suelen ser entre 95 y 102 y deben cumplir una serie de normas en la composición para no tener ningún tipo de sanción por parte de la FIA, la Federación Internacional del Automóvil.
La composición química del combustible está sujeto a unos parámetros de densidad, conductividad eléctrica…
El combustible es la base para que el coche de F1 realice el proceso de combustión y de manera directa influya en el rendimiento del motor. Si el peso del combustible es muy alto, el coche rodará a una velocidad más baja, por eso el combustible que fabrican las escuderías para cada uno de sus monoplazas es mucho más ligero que el combustible comercial que se puede encontrar en cualquier estación de servicio.
Algunos de los cambios que también sufre el combustible está relacionado con la calibración del mismo. Los ingenieros de cada escudería están continuamente trabajando en la composición química que llevarán sus coches.
Hace muchos años, la FIA permitía que cada escudería usará el combustible que quisiera, con la libertad de realizar todos los cambios químicos que quisieran. Algunas de las mezclas que se permitían eran mezclas combustible de avión, reactores y cohetes. Otros carburantes eran tan fuertes que una vez concluía el gran premio tenían que desmontar el monoplaza y limpiarlo todo para que no se dañara ninguna pieza. Esto sucedía debido a la gran abrasión que tenían.
Por otro lado, también había que tener mucho cuidado en la manipulación de los mismos porque desprenden unos vapores que son muy tóxicos. Desde entonces a la actualidad, han tenido que modificarlo de tal manera para que se ajustaran a las nuevas normas de emisión de gases contaminantes.
Hay una gran semejanza entre el combustible corriente que usamos en nuestro día a día y el de Fórmula 1. Sobre el 99% del combustible de la F1 es exactamente igual al que podemos encontrar en cualquier estación de servicio. El 1% restante se basa en los aditivos que usan para cuidar el motor del monoplaza.
Los coches de F1 no podrían ponerse en marcha con el combustible normal pese a la gran semejanza que existe entre ambos, sin embargo, nuestros coches sí que pueden funcionar con la gasolina que usan los monoplazas.
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¿Cuánto combustible consumen en una carrera?
Desde hace varias temporadas, el consumo del combustible en los monoplazas ha disminuido bastante. Al llegar una nueva era de motores, con la utilización de motores híbridos, para cada carrera se ha limitado el consumo máximo a 100 kg de combustible por cada gran premio. Con el paso del tiempo y los nuevos avances tecnológicos, al igual que los cambios en los monoplazas, desde 2019 se permiten 110 kg.
Cuando comienza un gran premio, ninguna escudería le suministra al monoplaza el tope de la cantidad permitida, ya que eso solo haría que rodaran a una velocidad mucho más baja al ir con peso de más.Como ejemplo, en 2020, el motor de Mercedes necesita mucho menos combustible para generar la combustión que hace que el monoplaza se mueva.
Combustible de F1 100% sostenible en 2026
En el año 2021, la FIA introdujo la posibilidad de un nuevo combustible que será mucho más sostenible que los utilizados anteriormente. Dicha fórmula se estipula que salga a la luz en 2025.
Con esta fórmula lo que se pretende es que de cara al año 2030, con la llegada del combustible sostenible al 100%, produzca cero emisiones. En este año habrá un paso intermedio con el combustible E10, que es una mezcla entre el combustible fósil y el etanol, para luego dar paso al combustible sostenible.
El hecho de que sea un combustible sostenible al 100%, no significa que se necesite modificar el motor, ya que es compatible con cualquier motor de combustión interna.
La FIA indica que dicho combustible está compuesto de carbono, desechos de basura o cualquier materia orgánica que no es alimentaria. Esto conlleva a un ahorro de emisiones de gases del como mínimo en 65%.
Por otro lado, aunque lleven este tipo de combustible, no afectará en absoluto al rendimiento de los coches, ya que estos serán igual de rápidos que lo son en la actualidad.