Cómo aplicar lubricante a una maquinaria

La lubricación de la maquinaria es fundamental para su correcto funcionamiento. A continuación, te contamos diferentes aspectos que debes tener e

Tipos de lubricantes en el mantenimiento industrial

La lubricación industrial es la fina capa que cubre todos los elementos que conforman la maquinaria para evitar que la fricción sea muy elevada. A su vez, le facilita el movimiento haciendo que se muevan de forma mucho más suave todos los componentes que están en contacto entre sí. Gracias a dicha lubricación, estamos eludiendo la posibilidad de aumentar y variar los cambios de temperatura, al igual que la corrosión y el desgaste.

Existen diferentes tipos de lubricantes industriales, hay que conocerlos todos para saber cuál es el que más se adapta a nuestra maquinaria. Para ello, se deben conocer las características de los mismos y la forma de utilizarlos.

  1. Aceites lubricantes. Este tipo de aceite es el más utilizado en la industria y existen diferentes tipos dentro del mismo.

· Grupo I. Este es el que tiene menos calidad y ofrece muy poca lubricación, ya que tiene un alto porcentaje en azufre.

· Grupo II. Este es un aceite hidroprocesado con menos impurezas y menos porcentaje de azufre.

· Grupo III. Este tipo es el que tiene mejores características de lubricación en comparación con los grupos anteriores. Para obtener esta mejor calidad, lo someten a presiones y temperaturas mucho más elevadas, por ello, tiene el índice de viscosidad más elevado y aguanta mejor la oxidación a la vez que soporta temperaturas más altas.

· Grupo IV. Este aceite se obtiene de los gases ligeros que suben por el tubo del proceso de extracción del petróleo. Estos son fabricados directamente por el hombre y por eso son mucho mejores lubricantes que el resto.

· Grupo V. Estos son el resto de aceites sintéticos que no proceden de la extracción del petróleo. Suelen proceder de los animales, las plantas y los alcoholes. Existen varios, y en función del uso que se les vaya a dar, es recomendable utilizar uno u otro: diesteres, poliésteres, poliglicoles, enteres fosfatadas, siliconas o ésteres perfluorados.

  1. Grasas lubricantes. Este tipo de lubricantes está compuesto por tres productos principales: aceite base, aditivos y espesante. Las grasas se pueden utilizar en diferentes partes: en los rodamientos, en los acoplamientos, en los cables, en los engranajes abiertos, en los reductores cuando son sometidos a altas temperaturas y hace falta sellarlos.
  2. Pasta lubricante. Está compuesta por los mismos ingredientes que las grasas lubricantes. Lo que las diferencia es la gran cantidad de sólidos lubricantes que tienen las pastas. Este tipo sólo puede tener como mucho un 5% de lubricantes sólidos, ya que si tiene más puede perjudicar cualquier elemento. Suelen usarse para los sellos, los antiaferrantes, los ensambles y en aplicaciones a temperaturas mayores de 350 ºC. Los sólidos lubricantes pueden ser: bisulfuro de molibdeno, politetrafluoroetileno, grafito, cobre, níquel y el nitruro de boro.
  3. Anticorrosivos. Este tipo de lubricantes se utilizan para conseguir que no se oxiden los componentes mecánicos. Por norma general, los lubricantes son anticorrosivos pero si están centrados únicamente en esta función, no protegen las piezas del desgaste. 
  4. Lacas. Una vez son aplicados, se secan creando una película alrededor de la pieza o componente dónde se aplica. Algunas de las características que posee son: consiguen que no haya fricción, disminuyen el coeficiente de fricción, no se pega el polvo y repele algunos contaminantes. Este tipo se puede utilizar en cadenas, en cables y en guías deslizantes.
  5. Recubrimientos. Los componentes quedan recubiertos cómo con una pintura, tiene la función de ser antifricción y además, dicho recubrimiento dura mucho.

Como puedes observar, existen muchas opciones de lubricantes, sólo debes encontrar la que más se adapte a las necesidades de tu maquinaria.

Importancia de la lubricación de máquinas y equipos

A la hora de poner en marcha una maquinaria, todas las piezas de la misma son sometidas a una fricción que hace que con el tiempo puedan aparecer problemas o averías. Cuando se le aplica el lubricante, se crea una envoltura que lo protege de este movimiento dándole más vida útil a las piezas y a la maquinaria. Existen varias ventajas que se obtienen al haber lubricado las piezas:

  1. La eficiencia energética. Al utilizar los lubricantes con un nivel de viscosidad alto, se consigue reducir la fricción, reducir al mínimo el desgaste y conseguir el máximo rendimiento de la máquina. Gracias a todo esto se minimiza el consumo energético total de toda la maquinaria.
  2. Protección contra los contaminantes. Cuando se utilizan los lubricantes sobre las piezas, al crearles esa película protectora, no solo los protege de la fricción con otras piezas de la maquinaria, también las está protegiendo de los agentes externos ambientales.
  3. Minimizar y controlar el calor. El lubricante que envuelve las piezas, también absorbe el calor que desprenden del movimiento y lo expulsa para que se enfríe.
  4. Ayuda a que no aparezca la corrosión. Con la ayuda de la lubricación se previene la aparición de oxidación o de corrosión.
¡Ahorra tiempo y dinero!

Waylet es la app gratuita de pago y fidelización móvil que te ofrece los mejores descuentos y promociones. ¡Descarga ya la app y comienza a ahorrar!

¿Qué pasa si no se utilizan lubricantes en las máquinas?

Los lubricantes para los motores de las maquinarias tienen diferentes cometidos y ayudan a prevenir que no se estropeen.

  1. Si no se utilizaran los lubricantes, las piezas acabarían por deformarse y comenzarían a dar fallos en cualquier momento de su vida.
  2. El calor se acumularía debido a la alta velocidad a la que se mueven.
  3. Las impurezas se acumularían por todo el motor debido a la combustión y al propio desgaste del movimiento.

Aplicación de lubricantes en una maquinaria

Para aplicar los lubricante a una maquinaria se puede hacer de diferentes formas:

  • En los engrasadores. Estos son unos depósitos dónde se almacena el lubricante, de esta manera y gracias al movimiento manual, el aceite llega a todas partes.
  • Mediante un baño de aceite. En este caso, los elementos que se quieran lubricar, se deben sumergir parcialmente en el aceite. Conforme se van moviendo las piezas, lo van absorbiendo y lo van transmitiendo a los demás.
  • A través de la bomba de aceite. Es un gran depósito en el cual se juntan el aceite y el elemento que se quiere lubricar. El lubricante fluye a lo largo de todos los mecanismos y mediante un sistema de bombeo hace que vuelva a llegar a todas partes.
  • Por barboteo. Está formado por un sistema circular que va recogiendo el aceite de un depósito y lo suelta en una bandeja que introduce el líquido de lubricación en el mecanismo.
  • Una nube de aceite. Gracias al principio de Venturi es como se aplica este lubricante, mediante pulverizaciones a los elementos.